Buscar este blog

martes, 7 de abril de 2020

Miércoles Santo: El perdón. La cena, gesto de estar juntos


Quinta-feira santa – ZENIT – Portugues
Foto: Zenit
Ellos se ajustaron con él en treinta monedas


En aquel tiempo, uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue a los sumos sacerdotes y les propuso: ¿Qué están dispuestos a darme, si les entrego a Él? Ellos se ajustaron con él en treinta monedas (Mt 26, 14-25).

Judas Iscariote, uno de los amigos de Jesús, así tramó la traición. El cambio fue por una miseria. Las traiciones e infidelidades siguen esa lógica. Se vende lo más preciado por nada. Parece que se hace lo mejor con ese proceder, pero sólo queda el vacío, la angustia, la desesperación y la nada.

¿Cómo encontrar salida de ese drama? Con la valentía de la aceptación, arrepentimiento, perdón y acudir a la misericordia de Dios que se nos da en la confesión.  Judas y Pedro traicionaron a su Maestro. Pero tuvieron finales distintos. Que tus pecados y errores te acerquen a la misericordia divina.

En este miércoles santo nos ubicamos en vísperas del triduo pascual. Tres días que ocupan el lugar central de la semana santa o pascua: viernes y sábado santo y domingo de resurrección.

La pascua era la fiesta más importante del pueblo de Israel. En esta fecha se hacía memoria de la liberación de Israel de la esclavitud por la mano prodigiosa de Dios. Durante la pascua se sacrificaba en el templo un cordero y luego tenía que consumirse en la familia. El mayor de todos hacía recordar los prodigios de Dios con su pueblo.

Jesús envió a sus discípulos a preparar la cena. Será la última cena y allí adelantará su pasión y muerte. Así como el cordero se sacrificaba y era comido, así también Cristo es el cordero que quita el pecado del mundo y en la Eucaristía se nos da como alimento.

¿Te animas a orar con fe el Padre Nuestro para que no nos falte la Eucaristía y el pan de cada día?



No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Cómo educar a los hijos en sintonía con el colegio?

  Cinco tips para los buenos resultados: Ora con y por los hijos El cariño y las responsabilidades van de la mano Dialoga sobre los compromi...